Oniriqueando...

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Custodiando
mi parque y -mi viaje-
“en sueños”
por la jungla
de MI MADRID...

Calmo la sed
y reposto frescor
para el camino...
-caminando-.

La corte reverencia
a “su señor”
en su vuelta a casa.

Agasajándole
con sus mejores
-galas-.

Una gruta furtiva
acogedora...
“con los amados y amadas”,
cómplice
de besos robados
“y otras jugadas”.

Barquitas
jugando al revés,
-muy emocionadas-.

Y los patitos,
esperando
a los niños
-son sus amigos-.

Y el duende,
entre risas
y travesuras
¡qué feliz!
después
de toda
la vida buscándole
“está aquí”.

Los monos y leones
-de mi niñez-
ya no están,
tan sólo queda
un lugar.

En todos los trabajos
se almuerza
y después
una buena siesta,
y nada mejor,
que con sabor
árabe...- y andaluz-.

Las luces
se me escapan,
y no
las puedo coger.

Y el farol guía
“celoso de la luna”
esperando,
a los bohemios
y enamorados.

...Y en el jardín
de las princesas...
ellas, esperando
“al príncipe de turno”.

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Publicado el martes 6 de marzo de 2007

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Este poema me surge por unas fotos en el Retiro que me salieron distorsionadas. Tengo un pps de ésto, puede verse aquí mismo. Javier

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